El barco ballenero

Turner tenía setenta años cuando exhibió El barco ballenero en la exposición anual de la Royal Academy en 1845. Tanto los admiradores como los detractores del cuadro convinieron en que era difícil distinguir los botes de pesca y la ballena dando coletazos, aunque están en el primer plano y en el centro de la composición. Turner pintó marinas a lo largo de su carrera y muchas de sus obras tardías, como esta, representan en un estilo casi abstracto la grandiosa fuerza del mar. Se cree que el tema se basa en parte en el libro de Thomas Beale La historia natural del cachalote (1839), que también sirvió de inspiración para otros tres cuadros en la colección de la Tate Gallery en Londres.