NARRADOR: Los espléndidos paneles pintados y dorados que adornan este salón fueron creados en París, pero estaban destinados a un pequeño salón de recepción en una mansión del sur de Francia que más tarde se convirtió en museo. Diversos instrumentos musicales tallados en la madera adornan las esquinas curvadas de la habitación. Los paneles de las puertas están embellecidos con incensarios humeantes, inspirados en objetos de la antigüedad clásica.

La pantalla de chimenea dorada también es de estilo neoclásico. Sus elementos verticales tienen forma de antorchas ardientes. En esa época, el reciente descubrimiento de las antiguas ciudades de Pompeya y Herculano había provocado un renovado interés por el mundo grecorromano.

Diversos objetos de esta habitación son de origen real. Entre ellos, la pantalla de chimenea que fue manufacturada para María Antonieta para su boudoir en el real palacio de Fontainebleau. A Luis XVI le gustaba mucho ir allí porque podía cazar en los extensos bosques que rodeaban el palacio.

La curadora Daniëlle Kisluk-Grosheide.

DANIËLLE KISLUK-GROSHEIDE: María Antonieta no tenía mucho interés por la caza y, para agradecerle que le acompañara a Fontainebleau, el rey le permitió que redecorara algunos de los salones. Esta pantalla de chimenea formaba parte del mobiliario realizado para el boudoir por Georges Jacob.